Comienza aquí una recopilación, a modo de diario de un peregrino, de muchas de las emociones vividas durante mi primera peregrinación a Santiago de Compostela. Recoge algunas de las anotaciones que realicé durante mi Camino, el cual arranco el domingo 9 de agosto de 2009 desde el poblado de O’Cebreiro en la provincia de Lugo.
Son recuerdos que me quedaron anotados en mi memoria, muchas fotografías que tomé y un video que he sacado de un conocido portal de internet o de uno de los blogs del camino, ya os contaré el porqué del mismo.
Espero que os resulte agradable el compartir mi vivencia.
9 de agosto de 2009
Es el primer día del camino, bueno realmente solo ha sido la llegada al punto de partida, la aldea de pallozas de O’Cebreiro.
El lugar merece la pena ser visitado, su dedicación es integra al turismo relacionado con el Camino, si bien todo el poblado conserva las casa típicas de piedra y se conservan aún varias pallozas (Construcciones circulares de piedra con tejados de paja)
La gastronomía como era de esperar muy buena, sobre todo ese caldo gallego de la casa rural donde me alojo (Casa Carolo).
Las gentes con las que he hablado muy agradables y amables.
10 de agosto de 2009
Hoy la ruta, planificada en 22km, discurre desde O’Cebreiro hasta Triacastela, para ya desde allí dirigirme a la casa rural donde me alojaré (Casa Pacios).
En la primera parte toca acomodarse a la indumentaria que me acompañará durante la próxima semana, mochila, botas y ropa cómoda. Como es agosto y llevo aún la mente en la tierra de donde provengo no había caído en que en la montaña hace un poco de frio, aunque consigo sobrellevarlo después de caminar un rato y a media que se abre el día.
Los paisajes de todo el valle de Piedrafita son espectaculares a primera hora de la mañana, con ese encanto especial que le da la el conjunto de niebla y sol de la mañana.
Durante el recorrido coincido con un grupo, con el cual me reencontraré varias veces en el camino y con un grupo de chicas de Castellón (Tere,Tere,Inma,María) que han iniciado el camino este año, pero con la idea de acabarlo en 2010 ya que es año santo.
A mi llegada a Triacastela y tras haberme acostumbrado ya a esa parte de ir sellando la credencial de peregrino, recibo un efusivo abrazo por parte de una de las hospederas del albergue de Triacastela: “¡Esto es un buen espíritu de peregrino!” (O algo similar), tras dirigirme a ella con una sonrisa para que sellara mi credencial.
Después de la comida, un poquito de retroceso para llegar a Casa Pacios. Una vez allí y durante la tarde, tras un rato de lectura del libro que me acompañará durante esta semana ( Los caracoles no saben que son caracoles de Nuria Roca ), un rato de tertulia agradable con la propietaria antes de regresar a Triacastela para la cena.
Durante el tiempo dedicado a la cena coincido con dos bicigrinos , Félix y José, que vienen desde Vitoria haciendo el camino en bicicleta y los cuales también están alojados en la misma casa rural, entrañable cena en la que pudimos descubrir los encantos de un caldo tinto de las que denominamos “Viñas Thysson”, jejeje, por eso de su carácter peleón.
11 de agosto de 2009
Hoy la ruta tiene como destino Sarria, la última población antes del km 100, aunque realmente me alojaré en Calvor en la Torre do Barrio, total 19 km previstos aunque la jornada me deparará al menos otros 10 km adicionales.
Es mi segundo día de ruta y ya van pasando por mi cabeza muchas emociones que es preciso anotar para no olvidar con el tiempo, pienso en porqué todos los que han hecho el Camino hablan tan bien de la experiencia, mi opinión es es porque todos los que estamos realizándolo tenemos la misma ilusión de llegar a Santiago de Compostela y de compartir la experiencia con aquellos que te encuentres, por eso el aire que se respira es tan positivo en todos los sentidos, y es por eso que todos estamos tan abiertos a compartir todo o simplemente una parte de nuestro camino.
El día arrancó y tras el correspondiente desayuno, la primera parada es Triacastela de nuevo, allí he de tomar la decisión de optar por la variante de Samos o por la variante de Sanxil. Para mi y tras la parte de camino que compartí el día anterior con las chicas de Castellón, decido tomar dirección Samos ya que su monasterio benedictino me llama la atención visitarlo. Una vez en Samos la visita mereció la pena.
Una vez visitado el monasterio, momento para la comida y retorno para continuar hasta Sarria.
Tras esta parada técnica coincido con una chica de Tokio (Rumi Makino) con la que compartiré el resto de jornada y la mañana del día siguiente. Curiosamente después de acabar el Camino, navegando por internet, descubro un video donde, la habían grabado justo un momento antes de encontrarnos (Sitio oficial Xacobeo).
Ya juntos decidimos optar por la montaña en vez de la carretera para finalizar la jornada de hoy, pero un descuido en uno de los cruces nos lleva a un rio que no es posible cruzar. Tras un rato de conversación y explicaciones sobre las historias rurales de la finca en la que nos encontramos (Con un agricultor y su hijo), encontramos el camino para regresar a la carretera que no habíamos querido coger tras la comida .
A la llegada a Sarria disfrutamos de un momento “Estrella de Galicia” en una terraza para reponer fuerzas y líquidos antes de dirigirnos a la Torre do Barrio en Calvor.
Ya en la casa rural una abundante cena casera cien por cien preparada por la dueña de la casa, la cual también nos ofrecerá un abundante desayuno el día siguiente para arrancar bien la jornada.
12 de agosto de 2009
Hoy será la etapa más dura de todo mi camino, Rumi y Yo iniciamos la etapa desde Torre do Barrio a eso de las 8 de la mañana a un ritmo bastante duro (La primera hora 7 km), ella pretendía finalizar el camino el viernes y regresar a Tokio ese mismo viernes,¡toda una experiencia para ella!.
Por mi parte hoy pretendo llegar hasta Porto Marín recorriendo un total de 28 Km.
Una vez en marcha, y después de pasar por el área de descanso 106, Rumi continua su camino a gran ritmo; yo me encuentro con un par de chicas de un pueblo de Alicante (Tete y Maite) con las que continuaré mi jornada hasta Porto Marín.
A nuestra llegada a Porto Marín, justo bajo las escaleras de acceso a la población y en un momento en el que nos intercambiábamos nuestros teléfonos, una de sus otras tres compañeras dejan una frase que me queda en el recuerdo, ya que a esas horas lo más importante es conseguir un sitio para comer: “¡dejaros de ligoteo que tenemos que comer!” .
Desde ese punto a mi me quedan aún 1 ó 2 km hasta llegar a mi alojamiento en el área recreativa Santa Mariña , una cabaña de madera dentro del camping. En ese último recorrido la parada inexcusable en la cafetería de la piscina hace lo imprescindible para reponer fuerzas y poder continuar, la última bajada, por carretera de asfalto fue muy dura.
Ya en la tarde y tras reponer fuerzas tanto para el estomago como para las piernas, visito la ciudad, en la cual consigo uno de los sellos más originales de mi credencial en la Cervecería Bancarrota. Ya a la noche mientras ceno en el área Santa Mariña converso con Gema, una peregrina de Socuéllamos que ha iniciado ese mismo día su camino.
Debido al alto ritmo del inicio de la jornada aparecen en mis pies lo que desde hoy hasta el final del camino llamaré “mis amiguitas de los pies”, dos pequeñas ampollas a las cuales conseguí mantener a ralla el resto del camino.
13 de agosto de 2009
Hoy la etapa, que inicio en el camping tiene como destino llegar a Lestedo, concretamente a la Casa Rectoral, que es donde tengo reservado mi alojamiento (20 km según mi guía de viaje).
La mañana esta envuelta en una neblina que hace que el cruce del rio Miño y después el caminar por los caminos cubiertos o semi-cubiertos de vegetación tengan cierto halo místico.
Durante la primera parte de la etapa, más o menos hasta las 11 de la mañana, me cuzo en varias ocasiones con un par de chicas que caminan a un ritmo muy similar al mío, intercambiando el sabido saludo entre peregrinos “¡BUEN CAMINO!”.
Un poco más tarde, mi camino y el de Tete y Maite, se vuelven a cruzar, continuando juntos el resto de la etapa. Curiosamente las dos chicas con las que me había ido cruzando en la primera parte de la etapa no eran otras que dos de sus tres amigas con las que habían emprendido la aventura de recorrer el camino.
Ya en Lestedo, la Casa Rectoral un magnifico refugio para descansar después de los no sé ya cuantos kilómetros acumulados en las cuatro jornadas de mi camino, no sin antes tener que hacer un esfuerzo extra para localizar un sitio donde poder saciar la inevitable necesidad de echar algo al estomago, cosa que al final hago en un albergue privado que se encuentra un par de kilómetros antes de llegar a Lestedo (Quedará sobreentendido que tocó volver atrás un par de km).
Ya en la tarde y degustando una cerveza en el jardín , uno de los propietarios me informa de la historia de la casa y me invita a ver su libro de fotografías, en el cual conserva un pequeño recuerdo de todo el proceso de rehabilitación, una opinión muy personal: ¡ todo un logro !, esta casa junto con el hotel Tafona do Peregrino fueron para mí los dos lugares más entrañables donde me alojé.
Ayer aparecieron mis primeras amiguitas en los pies, hoy se unieron dos más, antes de dormir toca sesión de cirugía para mantenerlas bajo control.
14 de agosto de 2009
Hoy parto de Lestedo con idea de llegar a Castañeda, 28 km en total y alojamiento previsto en el Pazo Sedor.
Inicio la etapa a eso de las 7:30, antes incluso de que hayan iniciado jornada laboral en la Casa Rectoral por lo cual toca desayuno tipo picnic que ya me habían preparado la note anterior.
La primera parte de la etapa ha sido sencilla, he ido caminando bastante despacio y no sé si por la hora, por mi ritmo o porqué, hoy la etapa la he realizado prácticamente en solitario.
A mi paso por Melide aproveche, y en esa macro pulpería que hay justo en el paso del camino, un pulpo a la gallega que esta de vicio, me resulta curioso ver la manera de cobrar el pan en función de lo que hayas comido de una cesta repleta que te ponen al principio.
Una vez comido arranco de nuevo para los últimos kilómetros de mi ruta diaria, ahora el sol calienta ya en exceso y en una de las lavandeiras por las que cruzo necesito refrescarme los pies para descargar las tensiones de la etapa, es allí donde coincido con un joven bicigrino de Catalunya con el que comparto unos minutos de la última subida hasta Castañeda.
Dentro de las anécdotas del día me resulta curioso aquel tenderete en medio del camino, en el cual se lee “Frambuesas 1,50 € la tarrina, Este es el verdadero espíritu del camino, confiamos en ustedes, dejen las monedas por favor. Papelera a 1 km. ”.
Ya en el Pazo Sedor, durante la cena, veo en la mesa de al lado a un personaje publico al cual no doy crédito identificar hasta que posteriormente, y después de finalizado mi camino, compruebo que se trataba realmente de él (Javier Solana).
15 de agosto de 2009
Penúltima etapa de mi camino 2009, en total 23 km en lugar de los 25 de la guía.
Ya se va notando en los pies los kilómetros recorridos y en la cabeza la sensación de proximidad a Santiago.
A mi llegada a Rúa (Hostal O 'Pino) la tarde me da para acabar el libro que me ha acompañado durante todo el camino : Los caracoles no saben que son caracoles - ¡no me llego para el final del camino! -
16 de agosto de 2009
Hoy he acabado mi primer Camino de Santiago, y a veces te preguntas qué es lo que queda de este recorrido, sencillo, un montón de buenos recuerdos y momentos vividos y todas las personas que has conocido o con las que has compartido algún momento durante tu caminar.
Hoy por ejemplo, llegando a lo alto del Monte do Gozo, me cruce con Irene, después un momento más tarde y tras tomar las correspondientes fotos de la catedral desde lo alto del montículo, volví a coincidir con ella, al desearle el típico “¡BUEN CAMINO!”, un sencillo gesto de compartir unas patatas fritas y una cerveza fue el punto de inicio que nos permitió compartir las vivencias de llegar a Santiago y finalizar nuestros caminos juntos.
A partir de ese punto empezamos a ralentizar nuestro paso, como si quisiéramos que el momento de la llegada a Santiago durara eternamente – los últimos 3 o 4 kilómetros casi dos horas y no por el cansancio - .
Estas vivencias compartidas dejo otra de las frases de este camino: ¡me gustaría encontrar frascos para guardar estos momentos y así poderlos revivir! (Quizás dejara en mi subconsciente algo para que unos meses mas tarde llamara “Emociones en lata” a mi blog personal).
Ya en la tarde recogida de la codiciada Compostela, sin colas, en la oficina del peregrino y varios momentos “Estrella de Galicia” compartidos.
Dentro de los momentos especiales del día, el contemplar la fachada allí tumbados en medio de la Plaza del Obradoiro durante casi dos horas, seguramente si no se ha vivido la experiencia parezca de locos, pero lo que veías a tu alrededor no eran unos simples turistas o una simple fachada de piedra, eran peregrinos con los que en mayor o menor medida habías compartido tu camino y la fachada era el símbolo del destino por el cual te habías esforzado durante más o menos días
Ya en el atardecer, aprovechando que la estancia en Santiago, cervecita con mi amiga Marta, la cual seguramente quedó aburrida de las historias que tanto Irene como Yo no parábamos de contar de todas nuestras vivencias durante nuestros caminos, una y otra vez caíamos en ¡me gustaría encontrar frascos para guardar estos momentos y así poderlos revivir!.
17 de agosto de 2009
Hoy toca un poco de relax para el cuerpo, de partida incluso tenia planificada una sesión de SPA de la que al final desistí para poder tener más tiempo para pasear por la ciudad y respirar el sentir de la meta alcanzada.
Era el día de completar la experiencia y sentir las emociones compartidas de muchos peregrinos en la misa dedicada a ellos.Ya dentro de la celebración religiosa no pude contener la emoción durante las ofrendas por los peregrinos(eso que me habían anticipado en Madrid al solicitar la credencial del peregrino y que me resultaba difícil de creer), así mismo tuve la oportunidad de ver el vuelo del Botafumeiro.
Ya en la tarde, momentos para comprar algún recuerdo para mis seres queridos los cuales servirán como referencias para contarles esas historias vividas durante mi última semana.
Al caer la noche tocaba compartir las emociones con Marta (La noche anterior fue muy fugaz el momento “Estrella de Galicia”) y con Nuria, otra amiga también de Santiago, compartiendo con las dos ya más pausadamente todas las vivencias de una semana de caminante.
Ya de regreso hacia mi hotel (Tafona do Peregrino), una sms en mi móvil mientras tomaba un helado, permitiría reencontrarme con Tete,Maite y Maribel – aquellas chicas de Alicante con las que había compartido parte de dos etapas de mi camino - compartiendo los cuatro nuestras experiencias y vivencias andadas, nunca mejor dicho, durante la última semana mientras tomábamos una copa en un pub del casco antiguo de Santiago.
18 de agosto de 2009
Amaneció esta jornada y hoy toca el regreso para Madrid, caminata andando desde el hotel “Tafona do Peregrino” hasta la estación de autobuses, desde allí tocan unas horas de autobús hasta Piedrafita de O’Cebreiro.
Ya en Piedrafita me encuentro con un grupo de peregrinos que inician su andadura esta jornada, compartimos taxi hasta O’Cebreiro para recoger mi coche que lo deje durante toda la semana aparcado junto a mi punto de partida, por el cuerpo me pasan pensamientos de unirme al grupo de estos tres chicos de Salamanca que lo iniciaban, esta vez solo con mi mochila y volver a vivir la experiencia.
¡Nunca pensé que fuera tan agradable vivir el camino!
¡Buen camino peregrinos!
que
¡El Camino pasa por la piel
más que por las cosas!
(by: C. Salto)
Algunas referencias adicionales en la web:
